El acueducto de Xalpa se encuentra en el estado de México muy cerca del municipio de Tepotzotlán. Se empezó a construir en el siglo XVIII por encargo de la orden Jesuita para llevar agua a la hacienda de Xalpa desde los cerros. Su construcción estuvo a cargo de los padres Pedro Beristáin, Pedro Sobrino y Santiago Castaño.
Acueducto de Xalpa
Debido a la expulsión de los jesuitas de la Nueva España la obra quedó inconclusa por un tiempo. Sin embargo, se concluyó la construcción del acueducto de Xalpa en 1854 gracias al Conde Manuel Romero de Terreros. Es especialmente relevante su altura de 61 mts ya que lo coloca entre los más altos en el mundo.
Para pegar las piedras que lo conforman, se utilizó una mezcla cal, arena y baba de nopal; muy parecido al estuco. Se recorre a través de un amplio canal por donde corría el agua hacia la hacienda de Xalpa.
Tiene una longitud de 438 mts y consta de 43 arcos. Cada arco tiene una altura de 61 metros. Tiene un estilo arquitectónico clásico, como los acueductos romanos que eran volados para librar barrancas.
El acueducto de Xalpa es también conocido como los arcos del «Sitio» debido a que hace referencia a una hacienda donde Maximiliano de Habsburgo fue sitiado cuando se dirigía al norte del país.
Su mantenimiento está a cargo del INAH y se encuentra en resguardo del comisariado ejidal de Magú. Actualmente el lugar es un centro de ecoturismo, donde se puede realizar senderismo, ciclismo y paseos a caballo; también consta con una tirolesa, un puente colgante y una zona de acampado.
Sin duda el acueducto de Xalpa merece ser visitado por su importancia histórica así como por sus espectaculares vistas.