La capilla abierta de Tlalmanalco es sin duda uno de los mejores ejemplo del arte tequitqui. La fusión del arte cristiano con el arte indígena. Se construyó en el siglo XVI por los Franciscanos para facilitar el proceso de conversión religiosa después de la conquista. Su estilo es plateresco y está llena de simbolismos. En primer lugar, en el arco central tenemos la representación de Dios Padre custodiado por dos ángeles.
La capilla está en Tlalmanalco, lugar de tierra plana, en el Estado de México. Es sobre todo relevante el alto relieve en los arcos donde observamos escudos, rostros y flores. Además es una de las 74 capillas de este estilo que tenemos en nuestro país.
La capilla abierta de Tlalmanalco
El frente de la capilla tiene 5 arcos totalmente decorados, mide 15 mts de largo y no tiene bóveda; ya que los indígenas se rehusaban asistir a culto en un espacio cerrado. Se piensa que está construida sobre el templo prehispánico principal de Tlalmanalco.
En las columnas de los arcos hay representaciones de la lucha entre el bien y el mal. Por ejemplo, en el lado izquierdo observamos dos personas tapándose sus oídos para no escuchar al demonio. Mientras que en la parte inferior del lado derecho observamos tres ángeles. En ambos relieves se observan animales y seres míticos, tal como lo vemos en la siguiente foto.
La parte superior de los arcos de la capilla abierta de Tlalmanalco tiene un alto relieve que muestra una calavera y huesos cruzados. Quizás representando el culto a la muerte por parte de los indígenas. Era común colocar imágenes de los dioses que veneraban.
La capilla abierta de Tlalmanalco fue testigo de la evangelización de la zona de los volcanes. También reivindica el arte prehispánico con la firme idea de no olvidar la forma de pensar prehispánica y sus costumbres.
Es de notar el trabajo de manos indígenas en los relieves de la capilla, que sin duda son una verdadera obra de arte.
En conclusión, la capilla abierta de Tlalmanalco es parte de la historia de nuestro país; que sin duda debemos de valorar y cuidar.