El ajolote mexicano (Ambystoma mexicanum) es un anfibio endémico de México que desafortunadamente está en peligro de extinción. En especialmente relevante su capacidad de regenerar sus extremidades así como órganos y tejidos lesionados. Habita concretamente en la zona lacustre de Xochimilco.
El ajolote mexicano
Tiene una piel lisa y una cabeza ancha y plana, mientras que el resto de su cuerpo es alargado y aplastado por los costados. Además sus patitas tienen dedos muy finos que carecen de uñas. Otro aspecto importante es que conserva su aleta dorsal aún en su etapa adulta, fenómeno conocido como neotenia; también tiene branquias externas en la parte trasera de su cabeza. Su aleta dorsal puede llegar a medir de 15 a 30 cm.
El ajolote mexicano puede llegar a vivir hasta los 15 años, su dieta consiste de moluscos, gusanos y larvas. Se aparean un sola vez al año. La hembra después de aparearse libera paulatinamente entre 600 y 1500 huevos, este proceso puede durar 3 días. A las dos semanas los huevos eclosionan y al año de vida pueden reproducirse. El peso promedio de un adulto es de 85 gramos y su color puede ser blanco, marrón o negro.
Para los nahuas era conocido como axolotl que significa monstruo del agua. Sin embargo, otra tradición prehispánica indica que el nombre proviene del dios Mexica de la muerte conocido como Xólotl.
Conservación del ajolote mexicano
Por suerte se están implementando medidas para la reproducción y cuidado del ajolote mexicano. El ajolotario Cuemanco fundado hace tres años por un grupo de mujeres originarias de Xochimilco. Su misión es sobre todo cuidar y dar a conocer la importancia de este anfibio mexicano. Se localiza en una chinampa del canal principal del embarcadero de Cuemanco. Abre sus puertas a sus visitante los días sábado y domingo con un horario de 12:00 a 18:00 hrs.
De hecho las fotos de los ajolotes de esta publicación se tomaron en este ajolotario. También el Parque Tezozómoc está ayudando con su conservación al convertirse en el nuevo hogar para esta especie. La UNAM está construyendo en Xochimilco canales aislados de las especies invasivas con la intención de producir zonas de reproducción. De igual manera existe una especie de ajolote en la laguna de Alchichica que de igual manera se encuentra en peligro de extinción.
En conclusión, el ajolote mexicano es una especie que debemos proteger para evitar su extinción de la vida silvestre; sin duda vale mucho la pena preservarlo para las futuras generaciones.